Hace unos pocos años, no podríamos pensar en Internet como algo a lo que accedemos de forma regular y menos con dispositivos móviles que podemos llevar encima. Hace algo más de veinte años, muchos de nosotros ni siquiera pensábamos en el concepto de Internet. Con una tecnología evolucionando tan rápidamente, ¿qué nos puede deparar el futuro? En los que a tecnologías se refiere, se puede decir que Internet es todavía un bebé.
Podemos ver sus principios sus raíces atrás en los años cincuenta, cuando la tecnología de los ordenadores también era muy joven. En los años sesenta y los setenta, equipos de ingenieros y científicos informáticos trabajaron para construir las bases de la red de redes, la cual se llamó ARPANET, uno de los predecesores de Internet. Comenzó de una forma modesta con una red de tan solo tres nodos.
De una forma gradual, se comenzaron a añadir redes entre ellas usando protocolos que estaban siendo usados en el proyecto de ARPANET. En los años ochenta, esta red demostró ser una herramienta de mucho valor para la investigación y la comunicación. Una década más tarde, todo el mundo se dio cuenta del potencial y el uso que se le podía dar a Internet como herramienta de conocimiento y acceso a todo tipo de información.
Desde entonces hasta hoy, Internet ha ido añadiendo nuevas tecnologías y nuevas formas de hacer las cosas. Llegados a este punto, ¿qué hay en el futuro en lo que ha Internet se refiere? Los últimos años han mostrado que la movilidad es una de las metas para las compañías. Redes de ordenadores inalámbricas y comunicaciones de alta velocidad hacen más fácil el uso de Internet.
La evolución de Internet y la evolución de la computación móvil serán algo que vaya de la mano en los próximos años. Veremos todas las características de Internet en más dispositivos y productos, la cobertura de las redes aumentarán, y las redes wireless actuarán como punto de acceso principal para la mayoría de dispositivos.
Las máquinas que forman la estructura y bases de Internet se verán complementadas con conexiones físicas de alta velocidad capaces de transmitir datos a increíbles velocidades. Podrán mandar el equivalente de cientos de discos DVD en un instante, y eso será normal.
Muchos expertos creen que forjaremos y experimentaremos una realidad física del mundo que nos rodea, combinada con el mundo digital que crearemos de forma paralela. Seremos capaces de ver el mundo de muchas formas diferentes. En el futuro, nos es demasiado arriesgado decir que tendremos implantes de ojos que nos permitirán ver el mundo digital sin la necesidad de una pantalla.
Incluso si decidir alterar nuestra anatomía nos resulta éticamente cuestionable, también se puede conseguir un efecto similar usando esta tecnología en dispositivos externos, como gafas o cascos virtuales.
Imagínate mirando a tu alrededor y activando una capa digital que te da toneladas de información sobre todo lo que te rodea. Puedes usar estas capacidades para realizar tareas corrientes, como buscar algún sitio para comer, un cine o una oficina de turismo. Sin embargo, esto solo es el comienzo. ¿Qué tal el poder conmutar lo que estás viendo para poder ver como era el entorno hace cientos de años.
Imagina estar de viaje turístico en Paris y con un simple comando poder ver como era en los tiempos de la revolución francesa. Internet y la tecnología mejorada con los futuros avances podrá hacer esto posible (ya existen adelantos en este sentido, con la realidad aumentada).
De todos modos, es posible que en este futuro, la privacidad se vea comprometida. Según nos movemos en este entorno móvil, se puede comprobar que la información privada se hace más pública y más expuesta. ¿Qué pasaría si con un par de gafas informatizadas como se ha comentado, podemos conseguir información de alguien que está al lado nuestro?
Un ejemplo puede ocurrir si quedamos con alguien en una cita. Decides saber como es esa persona, por lo que ejecutas un comando para saber lo que Internet tiene que decir sobre esa persona. A través del software facial de reconocimiento y una conexión a Internet, se puede tener acceso instantáneo a información pública sobre lo que te interés, incluyendo redes sociales.
¿Podría ser este el futuro de Internet? Lo cierto es autores de ciencia ficción ya nos han avisado con sus trabajos que las corporaciones y gobiernos tienen un especial interés en nuestra información privada para oscuros propósitos. Sin embargo, puede que el gran hermano acabe siendo cualquier de nosotros gracias a los avances de la tecnología. Cada uno tendrá su propia opinión sobre este tema, pero lo cierto es que las posibilidades son impredecibles en muchos sentidos.