Imagina que has decidido ordenar tu armario, pero en lugar de comprar las perchas y ganchos para colgar la ropa y objetos que tienes, te vas a la oficina, insertas las medidas de las perchas y ganchos que quieres en un ordenador y las imprimes al instante. Ahora imagina que tienes que crear una representación en miniatura de alguna famosa batalla para un proyecto del colegio, y usas la misma impresora para construir todos los soldados y el entorno, y todo con unos detalles perfectos. Esta tecnología puede estar ya más cerca de lo que piensas gracias a las impresoras 3D.
La impresión 3D está haciendo más fácil y rápido el poder producir objetos complejos con diferentes partes móviles y complicados diseños. Lo mejor de todo es que es algo que cualquiera podrá tener en casa para su uso personal. Esto se puede hacer gracias a un conjunto de tecnologías (AM) que hacen capaz que las cosas se puedan imprimir físicamente. Se puede crear un objeto añadiendo un material a dicho objeto capa por capa. Lo cierto es que se le han dado muchos nombres, pero la idea es la misma.
Se puede ver algunos de los principios básicos de esta tecnología incluso en las cuevas, donde a través de miles de años el agua ha ido formando capas y más capas de restos de minerales, lo cual forman las estalactitas. A diferencia de estas formaciones naturales, esta forma de imprimir es mucho más rápida y permite crear cosas determinadas que insertamos en el software de un ordenador. El ordenador va dirigiendo al ordenador para que vaya añadiendo una nueva capa al objeto.
Esta tecnología está creciendo a pasos agigantados. Algo que empezó como una manera de crear ciertas cosas específicas, es ahora una forma de crear productos para diferentes campos, donde se incluye tecnología aeroespacial, médica, automovilística, industrial, etc.
La impresión 3D está incluso siendo utilizada en la industria de la juguetería, el arte y la moda. La utilización de este sistema es amplia y abarca diferentes modalidades, incluyendo el utilizarlo en casa.
Esta forma de impresión se empezó a utilizar a finales de los años ochenta y principios de los noventa. Algunos prototipos permitían a los fabricantes ver los diseños de una forma más cercana o incluso probarlo antes de producir el producto final. Se podían crear los prototipos de forma más rápida que antes, algunas veces en días o incluso en horas. Estos modelos se creaban usando un software llamado CAD, y luego el hardware se basaba en los diseños de este programa para construir el objeto.
Desde entonces, la tecnología de impresión 3D ha ido evolucionando hasta nuestros días, y prácticamente el mismo sistema está siendo utilizado para crear varias cosas que se utilizan regularmente.
Se siguen mejorando cosas de forma muy rápida, desde los detalles del objeto hasta la cantidad de tiempo que necesita para hacerlo. El proceso es cada vez más rápido, los materiales y equipos son cada vez más baratos, y se están incluyendo otros materiales también, como por ejemplo metales.
Las máquinas que imprimen en 3D ahora varían de tamaño, y puede ir desde un microondas hasta un coche pequeño. Ahora que sabemos lo que es una impresora 3D, veremos algunas de las tecnologías que hay detrás de este dispositivo. Ha clic en el botón para ir al artículo: