Para el usuario medio, la información tecnológica es un universo lleno de lenguajes de programación indescifrable y hardware de todo tipo que ayudan que se consigan hacer cosas. Si no se está muy metido en el mundo tecnológico, escuchar a dos profesionales hablar sobre un sistema o tecnología puede ser como oír hablar a dos personas en un lenguaje extranjero.
A pesar de parecer un barrera impenetrable y muy difícil de superar, hay cosas que son esenciales de comprender en ciertas circunstancias, como por ejemplo si tienes un organización que se apoya en bases de datos o una compañía relacionada con alguna tecnología. Uno de los conceptos importantes que es conveniente tener claro es la integración de datos. En la superficie, la integración de datos parece una simple idea.
Al almacenar las organizaciones su información en múltiples bases de datos, necesitan una manera de recuperar los datos de diferentes fuentes y luego ensamblarlas de una manera unificada, dejando fuera cualquier información que no aplique a la búsqueda.
Cuando hablamos da datos, hablamos de cualquier tipo de información en un ordenador que puede ser transferido, procesado, modificado y leído. Puede ser contenido dentro de una hoja de cálculo, sonido en un archivo MP3, una película en formato AVI o información pura y dura creada como salida de un programa de ordenador.
La integración de datos se centra en la información, no en los archivos. En realidad, la integración de datos es una disciplina complicada. No hay un enfoque estándar a esta tecnología y muchos de los expertos en información tecnológica todavía están evolucionando con ello. Algunas técnicas para usar este sistema pueden funcionar mejor que otros para una organización, dependiendo de lo que necesite la organización.
Para comprender esto, lo mejor es ver algunas estrategias utilizadas por los profesionales para integrar varias fuentes de datos y entrar en el mundo de la gestión de las bases de datos. ¿Cuáles son los conceptos básicos de la integración de datos?

La integración de datos se centra principalmente en las bases de datos. Una base de datos es una colección organizada de datos. Podemos decir que es algo similar a un sistema de archivos, el cual es un grupo estructurado de archivos para que puedan ser encontrados, accedidos y manipulados fácilmente. Hay diferentes maneras de categorizar las bases de datos.
Algunas personas prefieren clasificarlas según los datos que se están almacenando. Por ejemplo, podrías clasificar una base de datos como un grupo multimedia si todos fueran archivos de sonido o de video. Otro método de clasificación revisa como se organizan los datos. Una técnica común para organizar estos datos es mediante tablas, que muestran la relación entre diferentes puntos en los datos almacenados.
Las tablas son como las hojas de cálculo. Las columnas defines las categorías de datos, mientras que las filas son los registros. Una base de datos usando este sistema es una base de datos relacional.
Hay otros tipos de bases de datos, como por ejemplo las programadas orientadas a objetos. Esto está basado en el lenguaje OOP, el cual es una variante de los sistemas de programación tradicionales. Siguen el esquema de insertar datos en un conjunto de instrucciones y luego producir una salida. Este lenguaje se centra en definir los datos como objetos y luego determinar como los diferentes objetos se relaciones e interactúan entre si.
Para crear una base de datos OOP, lo primero es definir todos los objetos que planeas almacenar en la base de datos. Entonces hay que definir la manera en que cada objeto se relaciona con cada uno de los otros objetos en la base de datos. Después de que identificas un objeto, lo pones dentro de una “clase”, o conjunto de objetos.
Para definir una clase, tienes que determinar qué datos de cada objeto dentro de cada clase tienen que tener. También se deben saber las secuencias lógicas (llamadas métodos) que afectarán los objetos. Los objetos dentro de un sistema pueden comunicar contigo u otros objetos usando unos interfaces llamados “mensajes”. Todo esto puede parecer complicado, por lo que es mejor explicarlo con un sencillo ejemplo.
Digamos que estás construyendo una base de datos que contiene información sobre deportes en España. Decides empezar por los jugadores de Tenis. Una vez que has creado una definición para esta categoría, lo puedes generalizar como una clase dentro de la base de datos. Rafa Nadal podría ser un elemento específico dentro de esta clase, también llamado objeto.
La clase de jugadores de tenis pertenece a una superclase de equipos deportivos españoles que también incluyen otras clases como fútbol o ciclismo. Para acceder a la información dentro de la base de datos (no importa como organices los datos) se debe usar un “query”. Un query es simplemente una petición para conseguir información. La gente y las aplicaciones pueden puede realizar peticiones a las bases de datos.
Una base de datos responde a las peticiones enviando datos que coincide con los parámetros de las peticiones originales. Las peticiones se apoyan en lenguajes de ordenador especiales, como por ejemplo el lenguaje SQL. Si has utilizado alguna vez un buscador de Internet (seguro que si), has realizado una petición, que son los términos de tu búsqueda.
La base de datos responde a las peticiones creando una imagen de los datos. Esto es simplemente una manera de mostrar dichos datos solicitados. En un sistema de integración de datos, la imagen que se nos devuelve solo muestra los datos directamente relacionados con la petición original.
Sabiendo esto, que usos y métodos se pueden usar con los sistemas de integración de datos. Lo puedes ver haciendo clic en el siguiente enlace: