Objetos virtuales

Para crear objetos virtuales generados por ordenador, necesitarás un software de modelación, como por ejemplo Maya o Blender. Estos programas vienen cargados con un gran número de formas en 3 dimensiones, los cuales son los bloques de construcción de objetos más complejos. Por ejemplo, puedes modelar un coche conectando cubos, cilindros, pirámides y esferas de diferentes formas y tamaños. Al ser objetos en 3D, están modelados en tres ejes (X, Y y Z), y pueden ser objetos y visionados desde cualquier ángulo.

Cuando empiezas a modelar un objeto, no tiene ningún color de superficie o textura. Todo lo que ves en tu pantalla es el esqueleto del objeto – las líneas de los cubos, bloques y esferas individuales que han sido usados para construirlo. Esto se llama “wireframe”. Cada forma que está compuesta por las líneas de un wireframe se llama “polígono”. Por ejemplo, una pirámide está hecha de cuatro polígonos en forma de triangulo.

En la práctica, hay varias maneras de para crear un modelo wireframe de un objeto. Si no te quieres confinar a construir objetos con formas ya preparadas como bloques y cilindros, puede usar una técnica más libre llamada modelación “spline”. Esto permite que los objetos tengan líneas más curvadas y suaves. Otro método es esculpir un objeto en arcilla u otro material parecido, y usar un escáner 3D para crear una copia wireframe del objeto en el software de modelación.

Una vez que tienes tu wireframe – por medio de cualquiera de los métodos de modelación que has elegido – puedes sombrear su superficie para ver como parecería como un objeto de 3 dimensiones. Pero para hacer parecer al objeto más real, debes añadir color y textura a la superficie. Esto se realiza en algo llamado editor de materiales.

Aquí puedes jugar con una paleta de colores sin fin, o crear la tuya propia ajustando los valores de rojos, verdes y azules. Algunas texturas de superficie muy comunes son las de madera granulada, roca, metal y cristal, las cuales suelen venir con el software de modelación, y pueden ser fácilmente aplicadas a las superficies. Se puede también crear ficheros de imagen en programas como photoshop, y envolver la imagen alrededor del objeto.

Dar brillo y luminosidad es quizás el componente más importante para dar a un objeto profundidad y realismo. Los programas de modelación permiten alumbrar objetos desde cualquier ángulo imaginable y ajustar como la superficie de tus objetos refleja o absorbe la luz. Hay tres valores básicos que dictan como una superficie responde a la luz:

  • Ambiente – El color de la superficie de un objeto que no está expuesto a la luz directa.
  • Difusión – El color de la superficie que está encarando directamente la fuente de la luz.
  • El valor que controla la reflexión o brillo de la superficie.

Los programas de modelación son especialmente de ayuda para crear objetos 3D realísticos, porque contienen algoritmos matemáticos que replican el mundo real. Por ejemplo, cuando iluminas una esfera desde un cierto ángulo, la superficie refleja la luz en la dirección correcta y la sombra es colocada en el ángulo preciso.

Estos detalles engañan la mente haciéndonos pensar que el objeto en una pantalla de dos dimensiones, tiene realmente profundidad y textura. A continuación veremos como los animadores usan los ordenadores para crear amplios paisajes digitales prácticamente reales. 

¿Cómo se crean estos paisajes digitales? Lo vemos en el siguiente enlace:

Paisajes 3D

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.