En una de las implementaciones más sencillas de POP3, el servidor realmente mantiene una colección de ficheros de texto – uno para cada cuenta de email. Cuando llega un mensaje, el servidor POP3 simplemente lo añade al final del fichero del receptor. Cuando verificas tu correo, tu cliente de email se conecta al servidor de POP3 usando el puerto 110.
El servidor POP3 requiere un nombre de cuenta y una contraseña. Una vez que te has conectado, el servidor POP3 abre tu fichero de texto y te permite acceder a el. Al igual que el servidor SMTP, este servidor entiende un conjunto simple de comandos de texto:
- USER – Introducir el identificador de usuario.
- PASS – Introducir la contraseña.
- QUIT – Salir del servidor POP3.
- LIST – Listar los mensajes y su tamaño.
- RETR – Recuperar el mensaje y pasarle un número de mensaje.
- DELE – Borrar un mensaje y también un número de mensaje.
- TOP – Mostrar las líneas de mensaje de la parte superior.
Tu cliente de email se conecta al servidor de POP3 y realiza una serie de comandos para traer copias de tus mensajes de correo a tu máquina local. Generalmente, lo que hará será borrar los mensajes del servidor (a no ser que le hayas dicho al cliente email que no lo haga). Puedes ver que el servidor POP3 simplemente actúa como un interfaz entre el cliente de correo y el fichero de texto que contiene el mensaje. Y de nuevo, puedes ver que este tipo de servidores es bastante simple. Te puedes conectar a el por telnet al puerto 110 y ejecutar los comandos tu mismo si quieres.
El servidor IMAP
Ya hemos visto lo sencillo que es un servidor POP3. Te permite tener una colección de mensajes almacenados en un fichero de texto en el servidor. Tu cliente de correo – como por ejemplo Outlook – se puede conectar a tu correo POP3 y descargarse los mensajes de estos ficheros de texto a tu ordenador. Esto es prácticamente todo lo que puedes hacer con un servidor POP3.
Muchos usuarios quieren hacer muchas más cosas que eso con sus emails, y quieren que sus correos permanezcan en el servidor. La razón principal de mantener tus emails en el servidor es permitir a los usuarios conectarse desde una variedad de máquinas. Con POP3, una vez que has descargado tu email, está atrapado en la máquina donde lo has descargado. Si quieres leer tu email, ya sea en tu ordenador de sobremesa o en tu portátil, POP3 lo hace complicado.
Los servidores IMAP (Internet Mail Access Protocol) es un protocolo más avanzado que soluciona estos problemas. Con IMAP, tu email se mantiene en el servidor de correo. Puedes organizar tus emails por carpetas, y todas estas carpetas pueden habitar en el servidor también. Cuando buscas tu correo, la búsqueda ocurre en la máquina servidor en lugar de tu propia máquina.
Este acercamiento te facilita mucho las cosas para poder acceder al correo desde cualquier parte, y de forma independiente del ordenador que estés utilizando.