Para empezar a chatear, lo primero es encontrar una sala de chat que encaje con tu estilo. En los mejores días del chateo, esto no ese muy difícil. Las salas de AOL estaban inundadas con usuarios interesados sobre cualquier tema que hubiera. Hoy en día, el universo del chat pude parecer en ocasiones como un pueblo fantasma, aunque no hay que desanimarse, ya que todavía hay algo para cada uno de nosotros en el horizonte de las salas de chat.
Lo único que se necesita es al más de búsqueda. De todos modos, hay programas de chat o de mensajería instantánea, que siguen siendo muy populares y usados, como es el caso del “Windows Messenger” que viene incorporado al sistema operativo Windows, El “Yahoo! Messenger” o el AIM (AOL Instant Messenger). También tenemos el servicio ICQ el cual tiene algunas de las salas de chat más variadas y activas del mundo.
También se puede navegar por la Web de Internet buscado salas de chat que se adapten a tus gustos y necesidades. Si se busca bien, todavía se pueden encontrar lugares que hablan de temas específicos, que van desde deportes, estudios, cine, entretenimiento, etc. Lo único que se necesita para unirse a una de estas salas, es conseguir un identificador de usuario o ‘nickname’.
En el caso del ‘Windows Messenger’ podemos utilizar nuestra propia cuenta de correo de Hotmail, y algo parecido pasa con el de Yahoo y AOL, ya que si tienes una cuenta abierta con estos programas, sirven para ingresar en sus salas de chateo. Muchas salas de chat te permiten ingresar como invitado sin una contraseña, o cambiar tu nickname tantas veces como quieras incluso durante la misma sesión.
Muchos sitios Web tienen sus propias salas de chat que da diferentes servicios para elegir. Algunos son muy específicos con la temática y otros son más generales. Normalmente son aplicaciones insertadas en las propias páginas Web, y donde nos puede decir cuanta gente hay en ese momento en la sala de chat, lo cual te puede dar una idea de la popularidad de esa sala antes de entrar. De todos modos, hay que ser conciente de que muchas veces cuando ingresamos en uno de estos espacios, las conversaciones pueden variar de lo que esperábamos.
Cuando primero ingreses en una sala de chat, tómate tu tiempo para leer lo que otras personas están escribiendo y conoce de lo que se está hablando. Muchas veces la confusión es grande, sobre todo si hay muchas personas hablando en la misma sala. Lo normal es presentarse y saludar, y a continuación intentar mantener una conversación coherente con los demás miembros de la sala de chat.
Elige el color y fuente de tu usuario para poder diferenciarlo de los demás, y así no confundirte con todas las líneas que van apareciendo en la ventana del programa de chat.
Una de las funciones que lleva en activo desde el principio de este tipo de salas de conversaciones virtuales, es la habilidad de enviar mensajes privados a un único individuo o a todo el grupo en la sala. Algunos programas de chat lo hacen de diferentes formas, algunas veces pulsando un botón especial, o poniendo etiquetas en los extremos del mensaje con el nombre de usuario rodeado por los signos < >. Un usuario experimentado, pueden mantener varias conversaciones privadas y públicas.