Se nos ha mostrado algunos bonitos ejemplos de espionaje por cortesía de Hollywood que nos ha entretenido increíblemente. ¿Quién puede olvidar la película “Misión Imposible” y el actor principal cayendo desde un techo hasta el sistema de ordenadores principal? ¿O todas las películas de piratas informáticos que podemos ver cada cierto tiempo en el cine o televisión?
Lo cierto es que te sorprenderías de lo fácil que puede llegar a ser entrar en un sistema ajeno si las circunstancias son las idóneas, y muchas veces lo son. Lo cierto es que hay muchas redes de ordenadores que están prácticamente indefensas ante los intrusos. En los días más tempranos de las redes computerizadas, la gente que las ponía en marcha eran entusiastas, y se requería un nivel de conocimientos que no todos tenían.
Hoy en día, las redes de ordenadores son muy populares por diferentes grupos de usuarios, y cualquiera puede montar una de estas redes en su casa sin demasiado esfuerzo. Muchos usuarios no son conscientes de los peligros que puede entrañar el no tener una red con los mínimos requisitos de seguridad.
Otros pueden creer que asegurar una red casera es demasiado complicado o confuso. Sin embargo, hoy por hoy, la seguridad de nuestras redes es más importante que nunca, y merece la pena el esfuerzo de aprender como limitar los riesgos de nuestros datos.
Una red no protegida puede permitir que hackers en busca de accesos no permitidos, accedan a toda la información que tengamos en nuestro ordenador. Puede incluso permitir que alguien tenga control de nuestros PCs, y los utilice para cometer delitos en otras redes y sistemas informáticas.
Puede ocurrir que aunque no hagan nada dañino en nuestra red, simplemente la utilizan para navegar por otras partes de forma anónima. Muchas ISPs están tomando medidas de seguridad, aunque también es cierto que algunas están empezando a cobrar por cantidad de datos descargados. No nos gustaría encontrarnos con una factura gigante por descargas que ni hemos hecho.
Con las herramientas adecuadas y el conocimiento necesario, se puede reducir las oportunidades de ver nuestra red comprometida por virus o hackers con malas intenciones. Lo veremos a continuación en los siguiente artículos de una forma sencilla y fácil de hacer, donde cualquier podrá dar un grado de seguridad óptimo a su red en casa.
Cuando hablamos de redes de datos caseras, generalmente queremos decir un sistema compuesto de al menos dos dispositivos conectados entre si. Usualmente, estos dispositivos también se conectan a Internet. Teóricamente, si tienes un solo ordenador conectado a Internet, ya formas parte de una gran red de ordenadores. Es cierto hasta cierto punto, aunque tu parte de la red se queda en casa.
Los ordenadores que funcionan con el sistema operativo Windows, están más en riesgo de ser invadidos por amenazas externas si lo comparamos con Linux o MAC OC. Esto es normal si tenemos en cuenta que Windows domina el mercado de los ordenadores. Esto significa que Windows es un gran objetivo para la gente que quiera aprovecharse de los recursos de este sistema operativo (las opciones son mayores).
Otros dispositivos que puede comprometer una red en casa incluyen routers, firewalls, módems, consolas de juegos, aplicaciones, y elementos que ni siquiera te podrías imaginar. Dependiendo de los protocolos que utilices, puede que tengas muchos dispositivos conectados a tu red. Por ejemplo, elementos inalámbricos o por medio de bluetooth.
Desde el punto de vista de la seguridad, las piezas de hardware que te ayudarán a asegurar tu red en casa, son los firewalls y los routers. Los firewalls vienen en dos variedades: hardware y software. Puedes comprar un firewall físico o poner en marcha un programa que haga esta funcionalidad. Muchos routers que montamos en nuestra red, vienen con el firewall incorporado.
Los firewalls actúan como filtros. Te ayudan a monitorizar el tráfico de datos entre tu red e Internet. Si detectas tráfico que no es usual, puede ser un signo potencial de que la red se ha visto comprometida.
Estos firewalls tienen muchas opciones a elegir y las más restrictivas suelen ser las más seguras, pero también limitan mucho la navegación en la red. Si tienes un router wireless, debes asegurarte de que le pones una contraseña y habilitas la encriptación. Tener una red inalámbrica sin proteger no es una buena idea.
La mayoría de estos routers tienen encriptación WEP o WPA, la cual es más preferible y segura. Combinar una encriptación con una contraseña fuerte (combinando letras números, mayúsculas y minúsculas), es una de las mejores estrategias para empezar.
En la siguiente parte del artículo veremos como poder asegurar nuestra red con software. Haz clic en el botón para ver el artículo: