Empecemos por el acrónimo SETI – significa búsqueda de inteligencia extraterrestre (Search for Extraterrestrial Intelligence). Esta búsqueda usa telescopios de largo alcance orientados al espacio exterior. Usando estos telescopios – los cuales son esencialmente largas antenas satélite en forma de disco – y donde se busca la detección de señales de radio provenientes de otras civilizaciones inteligentes.
Los principios básicos detrás de SETI caen en tres factores asumidos:
- Tiene que haber formas de vida inteligente fuera en el espacio. La via Láctea por si sola, contiene billones de estrellas como nuestro sol, y el universo contiene a su vez billones de galaxias. Si la vida inteligente puede evolucionar en un lugar como el nuestro, presumiblemente puede hacerlo en otros muchos sitios.
- Cualquier civilización inteligente podrá descubrir ondas de radio y empezar a lanzarlas al espacio. Los humanos, como forma de vida inteligente, descubrió las ondas de radio hace tiempo, y hemos estado enviando señales de radio en diferentes cantidades durante el siglo 20 y parte de este. Lanzamos señales de este tipo en todas sus formas, desde AM y FM, a difusiones de televisión, pasando por satélites y rádares. Cada vez que abres la puerta de tu garaje, una señal de radio es lanzada.
- Cualquier civilización inteligente tiene que asumir que puede haber otras civilizaciones inteligentes, y tratará de enviar potentes señales hacia nosotros. De hacho, los humanos hemos intentado esto de varias formas.
Si la primera y segunda asunción es errónea, entonces SETI es realmente una perdida de tiempo. Sin embargo, si son unas conclusiones válidas y ciertas, solo es una cuestión de tiempo que detectemos algo.
El problema de SETI es que requiere unos masivos recursos de computación. Imagínate tener una radio que puede escuchar a todas las demás radios, televisiones, rádares, satélites y puertas de garaje, con todas las frecuencias que eso conlleva. Después de esto, el ordenador debe echar un vistazo a cada una de las frecuencias por separado y tratar de decidir si lleva una señal inteligente aparte del ruido y las interferencias.
Para que te hagas una verdadera idea del problema, la antena usada en la central de SETI, graba 35 gigabytes de datos todos los días. Según su página Web, el promedio que tarda un ordenador casero tradicional lleva unas 30 horas para procesar una unidad de trabajo, y los 35 gigabytes diarios mencionados antes, están divididos en 140.000 unidades de trabajo. Eso son más de 4 millones de horas de tiempo de computación solo para procesar un día de datos que merezcan la pena.
Comprar esa cantidad de potencia para computar tantos datos puede ser increíblemente caro, por lo que los organizadores de SETI pensaron en una ingeniosa manera de crear esta necesaria potencia de una forma mucho más barata. Cuando el ordenador está inactivo, muestra un salvapantallas. En la mayoría de los casos, un ordenador mostrando un salvapantallas no hace absolutamente nada. Toda la potencia disponible en tu ordenador está siendo desperdiciada. Por ello, SETI creo su propia salvapantallas, la cual debe ser instalada en el ordenador. Haciendo esto, procesas datos de SETI cuando no estás haciendo nada en el PC.
El salvapantallas descarga un paquete de datos que contiene una unidad de trabajo de señales de radio y luego lo analiza. Cuando a acabado, manda los resultados de vuelta y coge otro paquete. El salvapantallas en lugar de mostrar animales, paisajes u otros temas, muestra el trabajo en progreso. Cualquier puede descargarse el software de SETI y empezar a buscar vida inteligente en otros planetas.
Solo hay que ir a su página Web que está en el sitio Web de SETI e instalarse el programa que tienen disponible para todo el mundo. Tiene un tamaño muy pequeño (unos 800 K) y es fácil de instalar. Quién sabe si será tu ordenador el que consiga descubrir ese paquete que contiene la prueba de que existen otras civilizaciones en el espacio exterior.