La evolución de los formatos musicales ha revolucionado la manera que tenemos de coleccionar música y escuchar canciones. Los antiguos discos de vinilo solían ocupar mucho espacio en las estanterías. Las cintas de cassette también tuvieron su época y más de uno se acordará como tenía algunas veces que rebobinarlas con un bolígrafo y girando la cinta. Los CDs fueron los que tomaron su lugar y algunas veces eran susceptibles de tener un arañazo. Por otro lado, la invisible e intangible pista de audio digital no ocupa ningún espacio pero ocupa un espacio importante en el saturado mundo de la tecnología en el mundo.
Este es el motivo por el que los servicios de radio por Internet están tomando el control de la red en cuestión de música. Con este estilo de reproducir música, se puede conectar a colecciones enteras de nuestros grupos favoritos sin tener que almacenar ningún tipo de formato en casa. Uno de estos servicios es Spotify.
Sin embargo, Spotify no es una copia de servicios digitales existentes, como muchos de los que ya conocemos, como Napster. Tiene algunos interesantes servicios por si mismo que lo hace destacar y lo ha hecho tan popular, incluyendo herramientas que te permiten compartir listas de reproducción y canciones de forma inmediata por medio de redes sociales.
Dicho de una manera breve, Spotify es muy parecido a tener una versión del software de iTunes siempre que tengas una conexión a Internet, dándote acceso a la canción que tengas en mente (casi cualquier canción que puedas imaginar está en esta base de datos). Los defensores de Spotify dicen que es como poder escuchar cualquier canción en cualquier sitio – de forma gratuita o por una pequeña tarifa. Se puede decir que este es el origen del nombre ya te ayuda a encontrar (spot) e identificar (ify) las canciones que te gustan.
Para empezar en Spotify, todo lo que tienes que hacer es registrarte con una cuenta gratuita. Inicialmente, el servicio era por invitación solo para ayudar a la compañía tener control de la demanda por su producto. Gracias a la nueva participación de Facebook, se puede usar Spotify con un usuario de esta red social.
A diferencia de muchos servicios de radio en Internet, las cuales solamente están basadas en Web, tienes que descargar e instalar el programa para esta herramienta al disco duro. Una vez que has realizado esta sencilla tarea, estás preparado para conectarte en lo que la gente considera la tecnología que cambiará totalmente la manera de organizar y escuchar la música que escuchas.
La tecnología de Spotify no es nueva. Ha estado entre nosotros desde hace algunos años cuando la compañía lanzó el servicio primeramente en Suecia. Desde entonces, la compañía ha estado negociando licencias y lentamente expandiéndose por otros países, incluyendo Inglaterra, España, Holanda, Finlandia hace poco Estados Unidos. Dada la historia en tecnología que tiene Suecia, no es de extrañar que esta herramienta emergiera de este país.
Los suecos tienen uno de los sistemas de Internet de banda ancha más rápidos del mundo, como también actitudes más liberales con el tema de derechos de autor. Esto no significa que los suecos estén más predispuestos a la piratería, sino que su súper conexión a Internet y estilo de vida ha creado una cultura de tener acceso instantáneo a cualquier material que necesiten.
Lo cierto es que Spotify tiene el beneplácito de las compañías de música (al menos muchas de ellas) para compartir música, mientras que reciban unos ingresos por ello. Por supuesto, Spotify consigue dinero con los anuncios y publicidad entre cierto número de canciones (modo gratuito pero limitado) y los registros de usuarios con unas tarifas variables.
No ha sido un camino fácil y ciertas compañías de discos se han resistido en compartir sus catálogos de música, aunque finalmente han ido aceptando este método de distribución musical.
Según Spotify continúa extendiéndose como un método alternativo a la distribución ilegal de música, la compañía podría convertirse en la siguiente plataforma revolucionaria de la música digital. Ofrece a la gente acceso instantáneo a canciones específicas de todas las épocas y estilos.
Lo hace sin abusar de los bolsillos de sus usuarios y de una forma legal donde los artistas y compañías discográficas cobran por la distribución de su trabajo. El modo en que lo hace es otra historia. En la siguiente parte del artículo, veremos exactamente como trabaja Spotify, y como la compañía quiere hacer olvidar los formatos tradicionales que todos usamos.
Características de una cuenta Spotify
Si has usado alguna vez iTunes, la aplicación Spotify te dará de inmediato una sensación de familiaridad. Su apariencia y el interfaz de usuario es parecido, el cual te permite navegar y buscar música por artista, álbum, nombre de canción, género, casa discográfica o lista de reproducción.
Se pueden encontrar artistas y canciones por medio de palabras y frases claves. Aparte de esto, Spotify también encuentra música en tu disco duro local. Por lo tanto, ejecutas una búsqueda por el grupo cantante Michael Jackson, verás una copia de la canción “Thriller” almacenada en tu ordenador, aparte de otras versiones diferentes que puedan existir en la librería de Spotify. Spotify puede importar tu colección de música digital en su catálogo. Esto incluye varios formatos y muchos archivos de iTunes.
Una vez que encuentras la música que querías, simplemente haces clic en el play y Spotify comenzará al momento a reproducir la música a tus altavoces en un modo “streaming”. A diferencia de otros sitios de música que aleatoriamente seleccionan música similar a un artista o canción que has seleccionado, Spotify permite elegir y reproducir pistas individuales, las cuales puedes añadir a listas personalizadas.
Las cuentas Spotify gratuitas tienen algunas limitaciones, y hasta hace poco más con las nuevas normas que se han implementado. Hay un cierto número de horas que se pueden escuchar con una cuenta gratuita, y no se puede escuchar una canción más de cinco veces. Después de un periodo de prueba de unos seis meses, solo se permite unas diez horas de música al mes, con la misma limitación de número de veces por canción.
Aparte de estas restricciones, seguimos teniendo los anuncios cada cierto número de canciones, y que duran unos 30 segundos. Por supuesto, si se paga una tarifa por usar Spotify, se tendrán algunas ventajas en este tema, como por ejemplo hacer desaparecer la publicidad.
Por algo más de dinero, se puede conseguir una cuenta Premium y hacer sonar la música en dispositivos móviles de diferente tipo, como iPhones, Android, Palm, etc. También se puede descargar y almacenar pistas en tu ordenador o dispositivo para poder usarlas cuando no se está conectado a Internet.
El programa Spotify enfatiza el compartir música con otros, permitiéndote decirles a tus amigos que estás escuchando tu grupo favorito por medio de redes sociales como Facebook, y con un solo clic. De hecho, la reciente asociación de Facebook muestra como la compañía quiere compartir la música con toda la gente posible (por supuesto, usando sus servicios) para que la música continúe sonando. En el momento de escribir este artículo, se puede usar la información de la cuenta de Facebook para crear una nueva cuenta en Spotify. Entonces por defecto, Spotify compartirá tus listas de reproducción con tus amigos en Facebook. Se puede desactivar esta función si no te gusta, pero para muchos es una característica muy usada y popular.
En un primero vistazo, podemos ver que Spotify es una mezcla de software de música, radio en Internet y caja de música por demanda. Sin embargo, hacer todo esto posible requirió una seria planificación y conocimientos tecnológicos.
La tecnología de Spotify online
Muchos reproductores de música en Internet funcionan de un modo similar: eliges un músico o una canción y entonces el sitio Web comienza a enviar los datos de la selección a tu ordenador. Desde una perspectiva tecnológica y de usuario final, este sistema tiene algunas desventajas.
Si tenemos una conexión de Internet no demasiado rápida, la gran cantidad de datos que se están enviando pueden resultar en pausas, saltos y algunas veces es paradas de la canción, lo cual puede ser bastante molesto. Esto puede hacer que más de uno siga prefiriendo su colección de CDs o la música que tenga en su disco duro.
El software de Spotify usa algunos trucos para evitar estos errores al hacer las reproducciones. En lugar de usar sus propios ordenadores y ancho de banda para enviar las canciones a millones de usuarios, se basa mucho en las redes P2P para hacer los envíos de audio. Lo cual trabaja de la misma manera descentralizada que otros programas de compartir archivos, como puede ser Kazaa.
Cuando selecciones una canción, los ordenadores con Spotify inmediatamente comienzan a enviar datos a tu ordenador. De forma simultánea, busca a otros usuarios de Spotify que tienen la canción en sus ordenadores. Cuando encuentra la pista, le manda al software que envíe bits de la canción a tu ordenador, lo cual libera sus servidores y conexión de red. Spotify no dice cuantos datos coge de cada usuario individual para alimentar su red P2P, pero no suele provocar problemas en la conexión a Internet.
También usa otro truco para mantener las reproducciones fluidas y sin problemas. Lo hace almacenando en caché las canciones que escuchas en el disco duro, lo cual significa que tu ordenador es el que reproduce la canción en lugar de Spotify. Puedes ajustar el tamaño del caché, pero por defecto está a 10 GB, que es suficiente espacio para cientos de canciones.
Por otro lado, este software también es inteligente. Sabe qué la mayoría de los usuarios escuchan los álbumes de principio a fin, por lo que si estás escuchando un disco de Gary Moore, irá cargando el resto de las canciones del disco para que no haya luego retrasos.
Todas las canciones usando “stream” en Spotify usan un formato Vorbis. Al igual que MP3, este formato está comprimido para hacerlo más pequeño y más fácil de ser transferido. Dependiendo de la cuenta Spotify que se tenga (de pago o no), este envío de datos varía de velocidad.
Lo cierto es que ofrece varias maneras diferentes de reproducir una gran variedad de música. El punto fuerte de Spotify es muy simple: Te permite poder escuchar prácticamente cualquier canción al momento o descargarla de una fuente legal. Sin embargo, también hay algunos inconvenientes.
Los conflictos en las licencias siguen dando algunos problemas a los usuarios. Aunque Spotify le gusta presumir de su gigantesca librería de música, la experiencia que se tenga dependerá enteramente de tus gustos musicales.
Hay muchos grupos que no están integrados en Spotify y por tanto no se puede escuchar su música en este medio. Te puedes encontrar que simplemente los grupos que te gustan no existen en este programa. También puede ocurrir que solamente haya ciertas canciones de grupos y no tengan toda la discografía.
Una de las cosas que resultan muy interesantes de Spotify, es que cuando se busca una canción, también nos da como resultado versiones de otros artistas de esa canción. Esto hace que muchas veces tengamos gratas sorpresas. Del mismo modo, cuando buscamos un artista, aparte de su propia música, también nos dice que versiones de otros artistas ha hecho y las colaboraciones que ha realizado con otros artistas. Esto nos da la posibilidad de descubrir nueva música de nuestros grupos favoritos.