Por si no lo sabías, los primeros programas de ordenador se guardaban en pilas de tarjetas perforadas. Aunque han pasado muchos años desde que fueron usados para esto, las tarjetas perforadas todavía tienen algunos usos y su uso más típico es en máquinas pensadas para las votaciones. Lo cierto es que las tarjetas perforadas fueron inventadas antes que las computadoras electrónicas. Primero se usaron en máquinas de tabulación para registrar estadísticas importantes en varias organizaciones, como por ejemplo en censo de Nueva York.
La máquina que podía trabajar con esta tarjetas incluía un dispositivo de punzado, un artilugio de tabulación y una sección para organizar todo. Todo esto podía acumular y almacenar estadísticas.
La compañía que inventó y trabajaba con esta máquina se llamó “Tabulating Machine Company”, aunque con la llegada de nuevos socios se pasó a llamar IBM, la cual seguro que nos suena. Las tarjetas variaron con el tiempo, siendo la tarjeta original de veinte columnas con diez perforaciones en cada una.
A finales de la década de los veinte, IBM introdujo las tarjetas de ochenta columnas que usaban agujeros rectangulares en lugar de redondos, lo cual fue bastante significativo porque limitaba a los competidores de la compañía al antiguo e incompatible formato de agujeros redondos. Para competir con IBM, se creo otro formato que permitía noventa columnas de texto para que se almacenaran en tarjetas de 45 columnas, aunque no se usaron tanto al tener IBM prácticamente controlado el mercado.
El procesamiento de tarjetas no requería necesariamente el uso de un ordenador. Por ejemplo, algunas aplicaciones usaban artilugios para organizar las tarjetas y hacer las tabulaciones para hacer las funciones. De todos modos, esto no fue el estándar utilizado.
Los lenguajes de programación necesitaron que estos formatos de tarjeta se movieran a un formato de diseño libre y que se ajustara más a los lenguajes estandarizados que estaban surgiendo, como por ejemplo el COBOL y el lenguaje FORTRAN, y con esto las tarjetas perforadas fueron prevalentes en el mercado. No fue hasta los años setenta cuando el procesamiento de datos comenzó a utilizar otro formato que empezaría a desplazar a la tarjeta perforada, y fue la cinta magnética.
Hoy en día se siguen usando tarjetas perforadas. Como se ha dicho al principio, se usan en máquinas para votar (Estados Unidos), a pesar de algunos problemas que han pasado en los últimos años. Muchos grupos han cuestionado la efectividad y precisión de estas tarjetas, y han pedido un cambio a sistemas más modernos de votación. Sin embargo, estos sistemas se siguen usando de momento en el sistema americano de votación.